Rafael Márquez – Adriana Bracho
En el transitar de nuestras actividades en pos del material que nos permitiría contar y documentar la historia de la CUSIB, uno de los primeros objetivos que alcanzamos fue conseguir el libro El Orfeón Universitario Simón Bolívar a través de los años. Una historia de trabajos y éxitos 1970-1995 de Alexis Páez. Gracias a la amabilidad y buena disposición de Alexis, el archivo PDF del libro llegó a nuestras manos muy poco después de que lo contactáramos para solicitárselo. Al revisarlo, constatamos que allí se narraban los hitos más importantes de la CUSIB y tuvimos la oportunidad de agradecer a su autor.
Paralelamente, como complemento necesario al texto de Alexis, fuimos recabando fotos, programas, audios y todo el material testimonial que redundara en los detalles que queremos compartir en nuestra web. Para lo cual contamos con lo que cada excusibistas ha conservado a lo largo de estos 50 años y ofreció para el Proyecto.
Aunque satisfechos porque poco a poco nos llegaban más y más piezas del rompecabezas, la búsqueda y algunas interrogantes seguían presentes. Queriendo despejarlas, aprovechamos para preguntar al respecto cuando se realizaba la entrevista testimonial a María y Alberto. Fue entonces cuando ella nos soltó una bomba: “yo trabajé en el ensamblaje de unos libros que recopilan el archivo histórico de los coros de la USB”
… una bomba que dibujó sonrisas y desbordó nuestros más nobles instintos sabuesos.
SE INICIAN LAS PESQUISAS
Desde ese momento, los libros se constituyeron en el Santo Grial para el equipo del Proyecto. Si lográbamos ubicarlos, no sólo tendríamos gran parte de las incógnitas resueltas, sino que también podríamos agregar material a nuestras ya abultadas carpetas de escaneos. Nuestra historia tendría mucho más que contar y mostrar.
María nos dijo que habían estado en la Biblioteca y en las oficinas del Orfeón, pero que lo mejor era hablar con Pedro Antonio Silva -director del Orfeón- porque, con seguridad, él sabría dónde estaban.
Antes de que lográramos conversar con Pedro, Edna Ruckhaus contactó al Prof. Teruel -director de la Biblioteca- y supimos la grave situación por la cual atraviesa el edificio y todo lo que en él se encuentra. Por un momento temimos que aquellos libros también hubieran sido consumidos por el moho. Y aunque pronto supimos que nuestro Santo Grial no había corrido con tan triste destino, esa búsqueda nos permitió ayudar a visibilizar el tema de la Biblioteca e iniciar campañas para conseguir apoyo para rescatarla. De modo que bien valió la pena indagar allí por ellos.
Pero volviendo a los libros, finalmente pudimos contactar a Pedro, quien nos confirmó que sabía de los libros y que estaban en las oficinas del Orfeón ¡Bingo!
CRECE LA ESPECTATIVA
El camino parecía allanado para el encuentro. Sin embargo, Pedro comentó que nadie había entrado en las oficinas del Orfeón desde comienzos de la pandemia. No solo desconocía el estado de las instalaciones y los documentos, existían varios inconvenientes; el acceso a la Universidad estaba prohibido, su desplazamiento hasta Sartenejas era complicado porque su residencia está en Los Teques y, lo más importante, todavía se estaba recuperando del COVID… el rescate debía ser postergado.
Transcurrieron varios meses en los que surgieron algunas propuestas que más parecían una carrera de relevo con paso de testigo por la cantidad de colaboradores y logística que involucraban. Así que, lo prudente fue esperar por una ocasión menos forzada.
Pasaron varias semanas y llegó la triste noticia de que el rector, el querido profesor Planchart, nos había dejado. Días más tarde se confirma que el funeral se celebrará en el rectorado de la USB y la convocatoria incluye la participación del Orfeón. Además, se abre la invitación a todos los ex coralistas de la universidad y de la Schola que quisieran unir sus voces al homenaje de despedida.
SE LOGRA EL OBJETIVO
Los eventos se sucedieron de tal manera, que parecía que el mismísimo rector nos quería ayudar antes de irse. Ese día, después de las exequias, Pedro Silva pudo por fin volver a entrar a la oficina del Orfeón en Sartenejas sorteando, eso sí, alguno que otro “PROHIBIDO EL PASO”. Los escoltábamos Judith Schmitd – encargada de registrar los hechos-, Marisol e Ileana Bernaim, Agustín Pulgar y Rafael Márquez (coautor de esta nota).
Ese día, después de una gran tristeza por decirle adiós a un profesor amigo, pudimos compensar al recibir los tan deseados libros, 6 volúmenes tan grandes como el tamaño de su contenido.
… pero la espera continúa
Dados el encierro y la humedad a la que los libros han estado expuestos, antes de poder iniciar el proceso de revisión y escaneo del libro, es necesario someterlos a un tratamiento de limpieza y recuperación. Luego, manteniendo las precauciones necesarias como es el uso de tapabocas, podremos sí escudriñarlos hasta el cansancio y sacarles todo el provecho para el cual fueron hechos.
DE CARA AL FUTURO
En una rápida hojeada, pudimos determinar que el material de la CUSIB ocupa alrededor de dos tomos, lo que significa que quedan cuatro listos para que los amigos excantoría y exorfeón, se animen a engrosar los megas de www.cusibglobal.org con sus respectivas andanzas por el mundo coral.
En lo concerniente al equipo del Proyecto Documental, una vez concluido el trabajo, les buscaremos un sitio digno donde puedan reposar de nuevo sin ser maltratados por el tiempo. Y estamos confiados de que ese sitio será nuestra querida Alma Mater en un nuevo amanecer.
Inmensamente agradecidos a María Guinand y a todos los que trabajaron en la investigación, recopilación y organización de tan valioso material.
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